miércoles, 22 de mayo de 2013

No quiero que te vayas



Otra vez aquella tristeza en su cuarto, otra vez aquellos ojos grandes mirando el vacío desde su venta, otra vez todo volvía a donde empezó… “¿Por qué quieres irte?” – Susurró.

Sin darse cuenta, una lágrima calló lentamente de su mejilla, acabando en el suelo. Hacía tantos meses que no se encontraba en esa situación, que no lloraba por él desesperadamente. Él había vuelto en un día de frío para quedarse, para no marcharse a ningún lado sino era con ella, para quererse como nadie lo había hecho jamás, pero ahora, otra vez vacío.

Los días pasaban lentos y grises, el sol no animaba a que todo volviera a la normalidad y la oscuridad cada vez era más larga donde ella no encontraba la forma de salir.

domingo, 3 de febrero de 2013

Pensaba que eramos eternos



Otro día que vuelvo a recordar tu olor, aquel que dejaste sobre mi almohada para que soñara contigo. ¿Crees que las cosas están mejor desde que te marchaste? No pienses que lo sabes todo, porque no es así. Me imagino otra noche perdiéndome entre tu piel, entre las sábanas de la habitación oscura donde tantos días huíamos del mundo y solo era testigo aquel cielo estrellado. Hace frío desde que lo recuerdo y es que recordar duele cuando sabes que las cosas no cambiarán. ¿Qué sucedió? Pensaba que éramos eternos.

Los días pasan lentos mientras yo miro por la ventana imaginándome nuestro futuro juntos, imaginando que algún día me rescatarás para volver a escapar juntos de esta realidad que ahora forma parte de mi vida. Mientras tanto, te espero en cualquier lugar de este maldito mundo que nos hizo separarnos. 





No creas que te olvido, tenemos muchas deudas con la luna.