domingo, 25 de noviembre de 2012

¿Dónde están todos los besos que me debes?

Era un día raro. Desde que me desperté mirando las estrellas colgadas en el techo, lo supe. No sabía muy bien el por qué e intenté encontrarlo. En el fondo sabía que era por él, que se me había escapado de las manos un día de otoño. Y aún así, yo seguía pensando en sus ojos, como el primer día que lo vi parado a unos tres metros de mí. Parecía que llevaba queriéndolo toda la vida, que el mundo estaba hecho para nosotros dos. Solo nosotros.

Pero, después de todo desapareció y lo único que se me ocurrió preguntarle una mañana de frío y lluvia fue:

-¿Dónde están todos los besos que me debes?

Él me miró detenidamente, como si la pregunta tuviera una respuesta complicada y decidió contestarme con toda la sinceridad del mundo. Lo veía en sus ojos. Y me dijo cogiéndome la mano:

-Los tengo guardados en un cajón esperando a que nos veamos otra vez de nuevo para que salgan disparados hacia ti, ya que están deseosos por salir. 

1 comentario:

  1. Impresionante bicho, eso es lo que eres, y sí tranquila el baúl esta guardado perfectamente para que solo nosotros tengamos la llave para abirlo.

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